Necesitaba despejarme, por eso decidi salir a la calle a liberar mi espiritu.
Volvi a sentirme niña, cuando atravese por calles que fueron protagonistas de mil historias en mi niñez y adolescencia.
Fueron tantos recuerdos que no puedo olvidar, esa infancia tan feliz, tan sencilla, tan adorada. De repente mis ojos no se pudieron resistir a llorar, y brotaron en mi lagrimas de añoranza.
Senti como unas manos me tabapan los ojos. Mi corazon empezo a latir muy deprisa y no encontraba explicacion, pero mi olfato capto su olor, que me resultaba muy familiar, entonces de repente su voz vibro en mi oido, era él, aquel que me robo tantos sueños.
Pronouci su nombre tartamuedeando. Quite sus manos de mi cara, abri mis ojos y le vi, su rostro lleno al mio de feliciadad.
Como imagina que el estaria alli conmigo en ese instante a mi lado. El corazon no se habia olvidado de lo que un dia sintio tan inocentemente que nunca se atrevio a confesarlo.
Y despues de sufrir, reir, aprender....., durante tanto años habia llegado el momento de decir las cosas claras, de descubrir los verdaderos secretos que esconde el corazón. Era el momento que renaciera algunas cenizas del ayer, era el momento de empezar amar al niño que me hechizo los sentidos.
Era nuestro momento.
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